CIUDAD DE MÉXICO. – Roger Waters causó una gran polémica a nivel mundial, después de salir en uno de sus conciertos vestido con elementos Nazis y disparar un arma falsa. Esto provocó reacciones en su contra, pues fue considerado una falta de respeto total.
Esto sucedió durante un concierto que ofreció en Berlín, Alemania, algo que añadió más dramatismo a todo el acto. Roger Waters fue cofundador y uno de los líderes de Pink Floyd, una de las bandas más reconocidas a través de la historia de la música.
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El músico británico siempre se ha involucrado en diferentes polémicas, pues alza la voz para opinar sobre temas políticos e internacionales que considera injustos en otras latitudes del planeta.
Roger Waters se pronunció con respecto a la vestimenta que utilizó en su concierto y aseguró que son de mala fe los señalamientos que lo culpan, pues precisamente él está en contra del fascismo y fanatismo, por eso utilizo los elementos Nazi para mostrar su oposición a estos.
“Los elementos de mi actuación que han sido cuestionados son claramente una declaración de oposición al fascismo, la injusticia y el fanatismo en todas sus formas. Los intentos de presentar esos elementos como algo distinto son falsos y tienen motivaciones políticas.
“La representación de un demagogo fascista desquiciado ha sido una característica de mis espectáculos desde ‘The Wall’ de Pink Floyd en 1980”, se puede leer en un comunicado que publicó el músico en sus redes sociales.
“Me he pasado toda la vida denunciando el autoritarismo y la opresión dondequiera que los vea. Cuando era niño, después de la guerra, el nombre de Ana Frank se pronunciaba a menudo en nuestra casa, se convirtió en un recordatorio permanente de lo que ocurre con el fascismo sin control.
“Mis padres lucharon contra los nazis en la Segunda Guerra Mundial, y mi padre pagó el precio más alto. Independientemente de las consecuencias de los ataques contra mí, seguiré condenando la injusticia y a todos los que la perpetran”, agregó en su mensaje Roger Waters.
A pesar de aclarar el porqué de su vestimenta y los motivos por los cuáles se presentó así en su concierto, la policía alemana inició una investigación en su contra por probable ‘incitación al pueblo’, pues en el país teutón están prohibidos los símbolos, banderas y uniformes nazis.
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Roger Waters es señalado a nivel mundial
El compositor británico, que brilló durante décadas con Pink Floyd, se encuentra en el ojo del huracán por salir vestido con elementos nazis en sus conciertos, que se realizaron el 17 y 18 de mayo en el estadio Mercedes-Benz Arena de Berlín.
La comunidad internacional se lanzó contra Roger Waters y expresó su indignación contra lo que realizó el músico en territorio alemán, durante sus shows.
“(Es) consumado antisemita, obsesivo con deslegitimar al único Estado Judío donde reside la mayor comunidad judía del mundo, soporte de grupos terroristas como Hamas y Hezbollah. Utiliza sus shows para derramar odio”, declaró el Dr. Ariel Gelblung, director del Centro Simon Wiesenthal para América Latina.
“Hipócrita que defiende dictaduras y genocidas sosteniendo presuntas solidaridades con sus pueblos, pero sus shows sólo los lleva a cabo donde puede llenarse del dinero que dice despreciar. De repetir en América Latina las performances que presentó en Europa, es posible que sea procesado judicialmente en más de un país”, agregó Gelblung.
Por su parte, el Estado de Israel también se pronunció contra estos hechos y publicó: “Buenos días a todos menos a Roger Waters, que pasó la noche en Berlín profanando la memoria de Ana Frank y de los 6 millones de judíos asesinados en el Holocausto”.
Héctor Shalom, presidente de la Fundación Ana Frank para América Latina, criticó sin censura y de manera contundente a Roger Waters, a quien calificó como antisemita y racista.
“Sin duda, reivindicar el nazismo es mucho más que un acto que refleja su odio a los judíos y su conducta antisemita. Es también la denigración y ataque a todas las minorías perseguidas y asesinadas por el nazismo, es manifestación de su aborrecimiento por los cientos de miles de personas discapacitadas.
“Es homofobia en el desprecio por los homosexuales asesinados, es una postura antidemocrática al ponderar un régimen que fusiló a todo opositor político; es también racista al convalidar el asesinato y esterilización de los afrodescendientes, entre otras expresiones”, escribió Shalom en su columna para un medio uruguayo.
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Con información de Infobae
