Abandonaron sus tierras por miedo; la policía y el Ejército de Guatemala amenazaron que realizar un operativo para desalojarlos por la mala y ellos prefirieron tomar sus pocas pertenencias y caminar. Caminar al norte, a la frontera con el país vecino, la nación que hace 20 años les dio refugio, pero ahora se toparon con un México distinto, un México que quiere regresarlos por donde vinieron sin importar que allá, en su país de origen, ya no tienen tierras para establecerse.
Organizaciones civiles de México y Guatemala denunciaron por medio de un comunicado que desde el 2 de junio el anuncio de un operativo por parte de la Policía Nacional Civil y el Ejército provocó que cerca de 700 personas huyeran de sus tierras, en la comunidad de San Andrés en Laguna Larga, perteneciente al municipio de Petén.
“Las personas no tienen otro camino posible que caminar hacia la frontera con México a la altura del municipio de Candelaria, en Campeche”, denunciaron las organizaciones Mesa de Coordinación Transfonteriza Migraciones y Género (Guatemala-México), la Red de Organismos Civiles Todos los Derechos para todos y todas, la Misión Internacional de Observación de Derechos Humanos frontera Guatemala-México, entre otras.
Las personas llegaron a la línea fronteriza de México con Guatemala la tarde del lunes 5 de mayo y, según las organizaciones que emitieron el comunicado, no han podido avanzar más porque las autoridades federales amenazaron a las personas con deportarlos a su país de origen.
En el comunicado reportaron que lo que están viviendo las personas desalojadas representa una situación de crisis médico-humanitaria, ya que entre los cerca de 700 guatemaltecos que realizan el éxodo hacia México se encuentran niños y niñas con enfermedades gastrointestinales y cutáneas. También está el caso específico de un pequeño que sufrió una fractura en el brazo y no ha sido atendido porque tienen temor de asistir a un doctor y ser rechazados o deportados.
“El temor lo han provocado las mismas autoridades que se hacen presentes en la zona”, recalcaron en el comunicados.
Los guatemaltecos se establecieron en el ejido conocido como “El Desengaño” y viven bajo 35 carpas improvisadas y en mal estado, sin alimento suficiente y sin medicinas para tratar los malestares provocados por su larga caminata, el clima y el dormir prácticamente a la intemperie.
Las organizaciones que alertaron sobre esta situación acusaron al comisionado mexicano del Instituto Nacional de Migración, Ardelio Vargas Fosado, de decir que “el gobierno mexicano no comprará problemas de extranjeros”, con lo cual creen que el gobierno de México se negará a dar la condición de refugiados para estas personas y buscarán regresarlos a Guatemala, aunque allá no tengan tierras para establecerse.
“Como organizaciones de la sociedad civil que acompañamos en esta situación nos preocupa una respuesta igualmente de violación a los derechos humanos para las personas desplazadas”, se lee en el comunicado. “Vienen huyendo para salvar su vida e integridad desde Guatemala, sería una violación al derecho de asilo y principio de no devolución, compromisos que ambos gobiernos están obligados a cumplir por ser mandatos de Naciones Unidas”.
Según lo reportado por el periódico guatemalteco Prensa Libre, estas familias fueron desalojadas de Petén porque el Consejo Nacional de Áreas Protegidas argumentó que debían cuidar la biosfera de San Andrés en Laguna Larga, sin embargo, el gobierno de Guatemala se negó a dar alguna alternativa que reconozca formalmente a las poblaciones que habitan en esa zona, en la Sierra Lacandona y en la Laguna del Tigre.
El presidente de México, Enrique Peña Nieto se encuentra en Guatemala y tendrá reuniones con Jimmy Morales, mandatario chapín, por lo cual las ONGs pidieron que este asunto sea abordado como parte de la agenda para que se llegue a una solución y se termine el riesgo de los 700 guatemaltecos que viven un éxodo para llegar a México.
*
Podría interesarte:
¿Por qué Guatemala se está quedando sin agua?
¿Quién es La Patrona? La peligrosa sicaria que se escapó de una cárcel en Guatemala
Naufragio en el Mar Mediterráneo deja 34 refugiados muertos, la mayoría niños