MIAMI, ESTADOS UNIDOS.- Después de un día de pruebas terrible, Sergio “Checo” Pérez logró hacerse con nuevamente la pole position de forma sorpresiva. Después de una bandera roja en Q1, el piloto tapatío vio cómo su tiempo provisional en primer lugar de la qualy  se conviertía en definitivo, para así salir de la primera zona de la parrilla la tarde de este domingo.

El Gran Premio de Miami fue una prueba dura para los pilotos

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El Gran Premio de Miami es señalado por muchos expertos como una de las posibles mejores carreras del año ha empezado con muchas emisiones. A una pista que alcanza algunas de las más rápidas velocidades del circuito se le suman las peligrosas culpas que hoy le han costado raspones y segundos a pilotos como el mismo Checo. 

Y desde la Q1, Pérez había logrado ponerse al frente de su compañero y rival por el actual campeonato, Max Verstappen, con quien mido pulsos durante toda la clasificación. No obstante, los Ferrari habían salido a pista inspirados, y todo parecía apuntar a que los pilotos del Cavallino Rampante podrían encontrarse con un buen resultado para pelear los primeros lugares en carrera.

La etapa concluía con un Verstappen ya en primer lugar, seguido de Sainz y Pérez, con un amenazante Charles Leclerc en cuarto. Una vez en Q2, los pilotos afinaron estrategias y motores para ir mostrando lo de qué eran capaces este fin de semanas. Verstappen y Pérez continuaron dominando la carrera, pero la escudería Haas tuvo una noche de ensueño posicionándose por delante de otras como Mercedes para así acceder a la Q1.

Después de la descalificación temprana de Lewis Hamilton, parecía que nuevamente todo quedaría entre los Red Bull y Ferrari. Pero lo cierto es que esta temporada los Aston Martin, liderados por el siempre intrépido y veloz Fernando Alonso, han sabido competirles de tú a tú a los monstruos del campeonato. Mérito aparte a todos los que lograron llegar, pues la tarde en Miami ofreció a los pilotos altas temperaturas y fuertes rachas de viento que desestabilizaron a algunos pilotos.

Todo cambiaría en el minuto de la contra reloj, cuando Leclerc se preparaba para marcar su mejor tiempo de la tarde. Pero en un aparatoso choque contra el muro de seguridad, el piloto de Ferrari cambiaría el rumbo de la carrera. El piloto monegasco salió a matar o morir, y con menos de dos minutos en el reloj, la magnitud del accidente ameritó la bandera roja, en beneficio de Checo, quien en ese momento todavía contaba con la mejor vuelta de la etapa.  

Y es que después de un primer intento de vuelta fallido del piloto neerlandés, parecía que el líder del campeonato contaba con el tiempo suficiente para mejorar la marca de Checo. Este error tuvo como resultado que, una vez finalizada la carrera debido al incidente de Leclerc, el campeón del mundo deba salir desde la novena posición.

Checo Pérez en la pelea por el campeonato de la F1

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La noticia no sólo es positiva para Pérez por la extraordinaria posibilidad de conseguir otro triunfo, sino porque de hacerlo podría irse por delante del campeonato de pilotos por primera vez en su carrera y como hecho histórico para el automovilismo méxicano. Si bien la suerte ha jugado a favor del piloto de Guadalajara esta tarde, sus tiempos habían estado a la altura.

Lo del mexicano esta temporada ya no es casualidad y sus fans esperarán que mañana pueda confirmar su excelente qualy y así obtener la confianza necesaria para permanecer en lo alto durante el resto del año. Esto no será una tarea nada sencilla, pero la actitud y las declaraciones de Pérez apuntan a conseguirlo.

Aunque la probabilidad de lluvia aún amenaza el inicio de la carrera, lo cierto es que el espectáculo está garantizado en el marco de un Gran Premio que promete fuertes emociones y varios sustos. Una cosa es segura, con Pérez, Alonso y Sainz en la punta de la parrilla de Miami, este domingo se festejará en español.