El Golfo de México es una de las regiones marítimas más afectadas por la actividad humana, la explotación industrial y la pesca desmedida; por lo que cada año se ha desarrollado progresivamente una “zona muerta”, donde en sus aguas la vida muere. Se extiende desde la desembocadura del río Mississippi en EUA a lo largo de la costa de Luisiana y Texas abarcando unas 8 mil 776 millas cuadradas de mar, casi del tamaño de Gales.
“Cuando tratamos de escoger algo por su valor, lo encontramos atado a todo lo demás en el Universo”, fue la frase que dijo el activista y naturista John Muir refiriéndose a que la naturaleza está conectada siempre entre sí misma y que los ecosistemas son completamente dependientes al ciclo de la vida.
Los excesos en la depredación de recursos para el consumo humano han propiciado que la zona muerta aumente cada vez más en su tamaño, desde los fertilizantes utilizados por los agricultores en el río Mississippi, hasta la pesca desmedida y clandestina en las costas de Tamaulipas y Texas; los nutrientes naturales de los mares como el nitrógeno y el fósforo estimulan la creación masiva de algas microscópicas.
*Fuente: IFL Science
Posteriormente, estas algas mueren y sus restos quedan en el fondo, se descomponen donde las mismas bacterias que consumen los restos de las algas usan el oxígeno y dejan un mar anóxico que contribuye a el desequilibrio del ecosistema marino causante de la muerte de sus habitantes.
Algunas especies pueden escapar de la zona faltante de oxígeno, pero las criaturas inmóviles como esponjas, corales, entre otros que viven fijos al fondo del mar sufren los bajos niveles de oxígeno y sucumben engordando la tasas de mortalidad en la vida marítima. Estas muertes crean una reacción en cadena que se expande hasta alcanzar especies cada vez más y más grandes.
Si no se buscan medidas o leyes que regulen la actividad humana que causa la muerte masiva de algas y la falta de oxígeno, la zona muerta amenaza con expandirse considerablemente y genere un ecocidio del que nos podríamos arrepentir.