Durante las primeras horas de la mañana de este viernes, decenas de países alrededor del mundo activaron sus alertas: la estabilidad de su seguridad cibernética estaba en juego gracias al virus WannaCry, que atacó a los sistemas telefónicos y computacionales desde Estados Unidos hasta China, pasando por España y Canadá.

El ciberataque masivo se extendió a lo largo de todo el territorio mundial y ha afectado a las computadoras “más vulnerables”. Varias instituciones de cada nación activaron sus alertas: compañías telefónicas, empresas de seguridad y tecnología y hasta centros hospitalarios.

De acuerdo con El Mundo, durante los primeros minutos del ataque cibernético, WannaCry se limitó a extenderse por el sistema de salud de Inglaterra, sin embargo, ya alcanzó a alrededor de 74 naciones y se han registrado poco más de 57 mil ataques.

Los expertos definen al virus WannaCry como un programa informático que actúa de forma similar a la de los secuestradores: captura a los archivos cuando ingresa en el ordenador y exige una especie de “rescate” a la víctima. “Es el tipo de virus que más quebraderos de cabeza está dando actualmente a las grandes empresas a nivel mundial” dice El Mundo.

De acuerdo a la información publicada por el organismo español Centro Criptológico Nacional, (CCP) el ataque, supuestamente, aprovechó un hoyo en la seguridad de los equipos que operan con Windows, compañía que ya había prevenido a sus usuarios. Por su parte, el INCIBE (Instituto Nacional de Ciberseguridad) aseguró que el ataque ha afectado puntualmente a equipos informáticos de trabajadores de varias compañías

CCP confirma que el ataque bloquea el acceso a los archivos, tanto de sus discos duros como en las unidades de la red a las que estén conectadas, además de que “la infección de un solo equipo puede llegar a comprometer a toda la red corporativa”. El virus, entonces, afecta la máquina cifrando todos sus archivos y finalmente permite la ejecución de “comandos remotos” para distribuirlos al resto de máquinas Windows que haya en esa misma red.

Una de las empresas que sufrió uno de los mayores ataques fue la española Telefónica, cuyos empleados incluso tuvieron que abandonar sus labores y apagar de inmediato sus computadoras. Fuentes cercanas a la empresa afirman que es posible que el ataque se haya originado en China y que se está pidiendo un rescate en bitcoins, aunque el monto todavía no ha sido definido, equivale a aproximadamente 300 dólares por cada computadora afectada.

Hasta ahora, los responsables de la esparcir el virus todavía no logran ser identificados. El Mundo dice que muchos expertos coinciden en que se registrará un peligroso incremento de este tipo de ataques, pues los victimarios tendrán en sus manos cada vez mejores tecnologías, con las que lograrán alcanzar a compañías e individuos por igual. Incluso, en un futuro no muy lejano hasta los teléfonos celulares podrían verse infectados.

Hasta el momento, el gobierno de México no ha dado declaraciones al respecto ni ha confirmado o rechazado si sus equipos informáticos llegaron a ser infectados.

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