¿Quiénes son los buenos y quiénes son los malos? ¿De quién debemos cuidarnos? Esas dos preguntas cada día parecen tener respuestas menos claras en México, donde cada vez y de forma más constante aparecen muestras de que las autoridades —que supuestamente tienen el deber de proteger a los ciudadanos— se encuentran coludidas con grupos de la delincuencia organizada.Policías y ladrones juegan del mismo lado de la cancha, pateando como si fuera un balón de fútbol la sociedad mexicana, víctima de las consecuencias de un país rebasado por la corrupción e impunidad.La noche del miércoles 15 de marzo se difundió en redes sociales un video en el cual se observa a cuatro policías municipales de Culiacán, ciudad capital del estado de Sinaloa, en el noroeste de México, deteniendo a ocho jóvenes en una tortillería ubicada en la colonia CNOP.
Posteriormente llegan varios sujetos vestidos de civil, con chalecos antibalas y armas largas, los cuales recogen a los jóvenes detenidos y los suben a sus vehículos para llevárselos.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 20 horas, cuando las calles de esa ciudad aún se encontraban muy transitadas; el video fue grabado por vecinos del lugar, según información de El Sol de Sinaloa, medio local que difundió las escenas en su página de Facebook.
Según información del periódico Riodoce, los ocho jóvenes habían sido detenidos por el delito de robo.El secretario de Seguridad Pública del municipio de Culiacán, Víctor Hugo Sánchez Mendieta confirmó el jueves 18 de marzo en entrevista para medios locales que los policías que aparecen en el video sí son agentes de su corporación y, según sus palabras, los cuatro policías admitieron haber entregado a los detenidos porque fueron presionados por los delincuentes por medio de amenazas en contra de sus familias.
“No podemos dejar impune este tipo de hechos”, declaró Sánchez Mendieta en una entrevista para el diario Noroeste. “Nosotros no podemos realizar las investigaciones y determinar si fueron o no fueron presionados para realizar estos actos, nosotros lo que estamos haciendo es ponerlos a disposición para que la autoridad competente realice las investigaciones”.
Además afirmó que los cuatro agentes serán entregados a las autoridades ministeriales y él cooperará con lo que sea necesario para poder deslindar responsabilidades; también pidió a la ciudadanía que sigan realizando este tipo de denuncias para poder identificar a los elementos de su corporación que trabajan “fuera de la ley”.Sinaloa es uno de las entidades de México que tiene la mayor presencia de grupos del crimen organizado y en este 2017 la violencia se recrudeció; tan sólo en los dos primeros meses del año se han registrado 235 homicidios dolosos, lo cual representa un incremento del 30 por ciento en comparación con el mismo periodo del año pasado.Todo indica que esto está ocurriendo debido a que la extradición de Joaquín “El Chapo” Guzmán, líder del cártel de Sinaloa, provocó un reordenamiento interno en esa organización que se está arreglando por medio de balas y sangre.
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