En Estados Unidos, una de cada cinco universitarias es víctima de abusos sexuales, agresiones que pueden concluir hasta en una violación, un delito que tres adolescentes quieren prevenir con un método sencillo y alcance de muchas.Se trata de tres estudiantes de secundaria en Florida, quienes inventaron unos popotes con dos bandas adheridas que, al momento de entrar en contacto con una bebida, detectan si en ella hay alguna droga, como detalla el medio español ABC.La idea aún se encuentra en desarrollo, pero su finalidad es reaccionar a las drogas más comunes que los violadores usan para “adormecer” a sus víctimas, como ketamina, éxtasis líquido o rohypnol.
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Con la patente también en espera, el primer mercado en que buscarían vender sus popotes sería con la comunidad universitaria, así como en bares, antros o restaurantes, en cualquier sitio donde se vendan bebidas alcohólicas.La preocupación de los estadounidenses por frenar el número de mujeres que son violadas o abusadas sexualmente no es nuevo, ya que hace un par de años, un grupo de amigos pensó en prevenir la ingesta de bebidas adulteradas.Ellos pensaron en un vaso -ya sea de plástico o vidrio-, al que nombraron DrinkSavvy para que también detectara si a tu bebida le agregaron alguna droga, con el cambio de color de unas líneas en el cuerpo del envase o el borde. Pero que añadan drogas a tu bebida no es exclusivo para las mujeres, porque el líder de este invento, Mike Abramson, experimentó los efectos del rohypnol en su trago en una noche que salió a beber con sus amigos.
Este egresado del Instituto Politécnico de Worcester cuenta que la sensación del narcótico en su cuerpo fueron como si en lugar de haber ingerido una bebida, se hubiera tomado unas 15 y para su buena suerte, sus amigos lo cuidaron y lo llevaron de regreso a su casa.
Muchas mujeres que sufrieron de abuso sexual en Estados Unidos, no contaron con el auxilio de nadie y quedaron solas ante sus victimarios, bajo los efectos de las drogas que las hicieron todavía más indefensas.El consumo de drogas en Estados Unidos tampoco ayuda mucho a prevenir este tipo de delitos, ya que se calcula que más de 20 millones de norteamericanos -desde los 12 años-, han usado alguna droga o abusaron de medicamentos psicoterapéuticos.Además, en la gente joven tomar alcohol en exceso es normal para el 25 por ciento de la población, quienes tienen edades que oscilan desde los 12 hasta los 20 años, aunque en Europa este sector de la población ingiere más licor y fuman.
Sin embargo, la cantidad de jóvenes estadounidenses que han empleado drogas ilícitas es por mucho superior a los europeos. La proporción es del doble
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