Una tragedia aérea vuelve a sacudir Estados Unidos. Este lunes 4 de noviembre, alrededor de las 5 de la tarde, hora local, un avión de carga de UPS despegó del aeropuerto de Louisville con rumbo a Honolulu (Hawái) y poco después, se estrelló y explotó.
El avión, un McDonnell Douglas MD-11, estaba cargado con combustible para un vuelo de larga distancia desde su centro de distribución en Louisville, Kentucky. Minutos después del despegue, capturas de vídeo muestran que el motor izquierdo se incendió y en un momento el motor incluso se desprendió del ala, según declaraciones de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés).
En las imágenes se puede ver que el avión se elevó sólo unos metros, perdió control y se estrelló, provocando de inmediato que estallara en una bola de fuego sobre un área industrial cercana al final de la pista, justo en las inmediaciones del aeropuerto, dejando una estela de fuego, destrucción y humo negro que se alcanzaba a ver desde varios metros de distancia.
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Después del accidente del avión de carga, se dieron a conocer los daños y que hay al menos 9 muertos
Varias edificaciones, entre ellas una planta de reciclaje de petróleo y un negocio de autopartes, resultaron afectadas por la explosión y las llamas. Personal de emergencias realizó una evacuación parcial del área, mientras autoridades establecieron una orden de quedarse en un lugar seguro para zonas próximas al aeropuerto dada la magnitud del incendio y fragmentos esparcidos.
De acuerdo con informes oficiales, al menos nueve personas perdieron la vida como consecuencia del accidente; del total, varios fallecidos no estaban a bordo de la aeronave sino en tierra. Además, once personas resultaron heridas, muchas con quemaduras graves, y han sido hospitalizadas.
La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte ya ha comenzado su investigación oficial, junto con la Federal Aviation Administration (FAA). Se han recuperado las “cajas negras” y se ha documentado el campo de escombros, que se extiende por más de medio kilómetro. Uno de los principales focos es el desprendimiento del motor y la ignición del ala, que precedió el choque.
Luego del fatal accidente, el aeropuerto de Louisville suspendió operaciones y la zona de la pista donde ocurrió el accidente permanecerá cerrada durante varios días. En el centro de distribución de UPS, que es su mayor centro de carga con cientos de vuelos diarios, se han iniciado protocolos de emergencia y revisión operativa.
Este accidente de un avión de carga de UPS tras el despegue en Louisville es un recordatorio de la complejidad y riesgo asociados con operaciones de aeronaves pesadas en ruta de largo alcance, así como de los efectos colaterales que tienen en zonas industriales cercanas.
Mientras avanza la investigación, la posibilidad de fallos estructurales o mecánicos graves está siendo explorada y el sector aeroportuario y de carga deberá revisar procedimientos y mantenimiento para evitar tragedias similares.
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Con información de RT Español / Foto de portada: tomada de internet
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