Un economista brasileño ha perdido tres hijos en los últimos cinco años como consecuencia del cáncer, mientras él mismo sigue luchando contra la enfermedad. De acuerdo a información de BBC Brasil y de O Globo, los cuatro integrantes de la familia se enteraron en 2016 que sufrían de un desorden genético muy poco común que aumenta el riesgo de que una persona, al igual que sus familiares, puedan desarrollar cáncer.
El desorden genético es conocido como Li-Fraumeni, un síndrome que provoca cáncer hereditario y se presenta en muy pocas personas a nivel mundial. De acuerdo a las estadísticas de varios organismos médicos a nivel internacional, el síndrome de Li-Fraumeni se presenta en cinco de cada 20 mil familias en el mundo.
El caso de Régis Feitosa
Régis Feitosa es un hombre de 52 años que perdió primero a su hija más joven a causa de una leucemia linfocítica. Beatriz apenas tenía diez años. Después, el papá perdió a su hijo Pedro a los 22 años en 2020 tras un diagnóstico de osteosarcoma (cáncer en los huesos). Luego, la mayor de sus hijas, Anna Carolina, también fue diagnosticada con leucemia linfocítica, aunque pudo recuperarse con tratamiento. No obstante, en el 2021 se le encontró un tumor en el cerebro y murió meses después cuando apenas tenía 25 años.
El papá, Régis Feitosa, fue diagnosticado con cáncer en 2009 y, en ese momento, decidió que lo mejor era que todos sus hijos se realizaran estudios médicos. En ese episodio se confirmó la noticia: síndrome de Li-Fraumeni. Ante este escenario, los doctores le dijeron que las posibilidades eran muy altas de que el cáncer fuera hereditario.
Luego de consultar a varios especialistas, la conclusión fue la misma. Había muy poco por hacer, ya que el síndrome de Li-Fraumeni no puede prevenirse. En 2021, el papá recibió otra noticia confirmándole que ahora padecía linfoma de Hodgkin. Según las declaraciones de Feitosa para BBC Brasil, sus papás no le heredaron el síndrome de Li-Fraumeni que se desarrolla por la alteración del gen TP53. El impacto de este gen a nivel celular incrementa las posibilidades de desarrollar cáncer.
Al momento, Régis Feitosa sigue luchando contra la leucemia y el linfoma. No me siento culpable de esta tragedia. Mis hijos dicen que yo también soy una víctima como ellos. Yo pienso que hay que vivir la vida intensamente con la mayor felicidad posible, fueron las palabras del papá para BBC Brasil.
Foto de portada: Archivo/Régis Feitosa
Con información de BBC News Brasil