En varias regiones del centro y norte de Chile, la época de temporales ha provocado inundaciones y desbordamientos de ríos y presas. El agua potable se mezcló con la tierra deslavada y hasta el día de hoy, poco más de cuatro millones de personas no tienen líquido para beber, otras 400 han sido desplazadas, 19 están desaparecidas y al menos 4 han muerto.
Durante el fin de semana, las lluvias cayeron feroces en las zonas montañosas del país sudamericano, provocando que los montes se deslavaran y que los trozos de tierra se mezclaran con el agua del Río Maipo, que provee de agua potable a muchos barrios de la capital, Santiago.
De acuerdo a un comunicado de prensa, las autoridades ordenaron el cese de las plantas de producción de agua potable, con las que se suministra agua a al menos 30 localidades, ya que los niveles de turbiedad alcanzaron los 230 mil UNT cuando lo normal es de 500 UNT.
1.5 millones de hogares (alrededor de cuatro millones de personas) han sido afectadas y hasta el momento no se sabe cuándo se normalizará el servicio. Por ahora, los ayuntamientos han dispuesto puntos de distribución y abastecimiento en más de 50 puntos.
La zona Metropolitana, Valparaíso, O’Higgins y Antofagasta son las más afectadas, mientras que alrededor de 400 permanecen aislados y 19 personas están desaparecidas tras el derrumbe de un puente en Cajón del Maipo, cañón andino de la región Metropolitana.
Medios locales informaron que en la región de Antofagasta, alrededor de 120 personas tuvieron que ser evacuadas de una zona turística, San Pedro de Atacama, por la amenaza que representó la crecida de un río.
Al respecto, la presidenta Michelle Bachelet publicó en su cuenta de Twitter: “Equipos a cargo de la emergencia trabajan en terreno para conectar personas aisladas y restablecer el suministro de agua apenas sea posible”.
Una de las cuatro víctimas mortales registradas hasta el momento fue una niña de 12 años ya que el automóvil donde viajaba con su familia fue arrastrado por un deslave en la región de O’Higgins, al sur de Santiago. Las otras dos personas murieron en Cajón del Maipo.
De acuerdo a la BBC, el Intendente de la Región Metropolitana de Santiago, Claudio Orrego, afirmó que las condiciones en las regiones montañosas continúan “muy malas” y que los torrentes observados desde el sábado son “absolutamente anómalos” para el verano.
Restaurantes y tiendas cerraron sus puertas y las autoridades ordenaron a las escuelas retrasar el inicio del ciclo escolar, programado para este lunes. Las lluvias suceden después de una temporada de sequía y de incendios masivos.
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