Así como el pincel roza el lienzo; así como la pintura se queda plasmada por siempre en el cuadro; así fue el amor entre Frida y Diego. Una historia que trasciende el tiempo y el espacio; un amor que quedará grabado por siempre; un amor para la eternidad. Luego de la polémica que la venta de los murales de Diego Rivera para salvar de la quiebra a la ciudad de Detroit, será allí donde se presente una muestra del trabajo de una de las parejas más emblemáticas de México.

A partir del 15 de marzo se presentará por primera vez una muestra conjunta de la pareja, y cuyo Instituto de Artes resguarda los famosos murales industriales de Rivera

Los visitantes del Instituto de Artes de Detroit podrán saberlo todo sobre los murales industriales que Diego Rivera creó en las paredes del museo, y pretende acercar a quienes  desconocen cómo Rivera y su esposa Frida Kahlo vivieron durante un año en la ciudad, mientras él realizaba su obra.

El Instituto de Artes de Detroit planea una exposición que se enfocará en ese periodo entre abril de 1932 y marzo de 1933, que el museo califica como “un momento decisivo en la carrera de los artistas”.

La mayoría de las obras que Kahlo creó en Detroit se presentarán por primera vez en la ciudad, informó el instituto en un comunicado emitido el lunes. La exposición, que se presentará del 15 de marzo al 12 de julio de 2015, incluirá entre sus 80 obras los bocetos de Rivera para los murales de Detroit.

“Después de no haberse presentado en casi 30 años, estas magníficas piezas demuestran la gran ambición narrativa de Rivera, imaginada como una síntesis entre los valores espirituales de México y la fortaleza industrial de Estados Unidos”.

El Museo High de Atlanta presentó el año pasado la mayor exposición conjunta de los célebres artistas mexicanos en Estados Unidos. Rivera y Kahlo estuvieron casados por casi 25 años, pero sus obras pocas veces se presentan juntas por la diferencia de estilos.

En el caso de la exposición del instituto de Detroit el “alcance es definitivamente más limitado” pues se enfocarán en lo importante que fue Detroit para la carrera de ambos. Frida definió su estilo, en Detroit encontró su voz. Y Diego, por su parte, creó lo que consideraba era su mayor obra.