«Tienes que dejar de culpar a tu pareja de tu falta de orgasmos», escuché a alguien decir en algún lugar de la ciudad en algún dÃa de cualquier mes del siglo XXI. Y es tan cierto, el empoderamiento femenino del que todos hablan no se limita a una mujer que usa tacones y además es empresaria y también lee 90 libros al mes ni a las mujeres que deciden criar un hijo ellas solas (suceso que no deberÃa sorprendernos en lo absoluto). Esa emancipación, en todo caso, deberÃa iniciar en la alcoba, a partir de la liberación sexual femenina, en la exaltación del placer sin codependencias. Y es cierto, la petite morte no deberÃa depender de nadie jamás, asà también nos ahorrarÃamos decepciones y cuestionamientos sin fundamentos sobre nuestra posible frigidez.
Una mujer que la está rompiendo en el campo y nos está dando lecturas revitalizantes sobre el tema es Emily Nagoski, investigadora estadounidense que propone la lectura de contenido cientÃfico digerido sobre orgasmos femeninos y sexualidad en general como una forma para enaltecer el placer femenino.
Para la BBC, narra que empezó a ocuparse del tema cuando, calificando los exámenes de sus alumnas, varias de ellas respondieron algo que en esencia decÃa algo como: «soy normal, porque sea diferente de otras mujeres, eso no significa que hay algo malo en mû, para la pregunta de cuál habÃa sido la enseñanza más importante del curso de sexualidad humana.
Nagoski, que se graduó de la carrera de sexualidad humana en la Universidad de Indiana, descubrió que la mayorÃa de la información que se difunde respecto a la sexualidad femenina tiene un corte moral y que hay pocos estudios cientÃficos que la sustenten.
Por eso la investigadora recabó el testimonio de decenas de mujeres sustentadas y acompañadas de teorÃas cientÃficas en el libro Come as you Are (Simon & Schuster, 2015), en español Ven tal como eres o mejor Vente tal como eres.
*Foto: NY Magazine.
Las lecciones más importantes (de acuerdo con Goodreads):
UNO: TODAS las mujeres son diferentes, asà que cada una tiene su propia sexualidad, su manera especÃfica de obtener placer sexual… de venirse. Entonces, deberÃamos empezar a ver cada sexualidad como única e irremplazable, «como una huella digital». Esto también se debe a que la anatomÃa femenina varÃa más que la de los hombres e incluso nuestras formas de responder al «mundo sexual» son más amplias. En otras palabras, no deberÃamos juzgar nuestras experiencias sexuales tomando en cuenta las de otros.
DOS: El sexo depende de un contexto SIEMPRE, asà que «las complicaciones de la vida cotidiana tendrán una influencia en el contexto que envuelve la excitación femenina, el deseo y el orgasmo». Esto es cierto, pensemos tan sólo unos minutos en todas las veces que los sucesos del dÃa (si estuvimos estresadas o no, si estamos sentimentales, si tenemos otras prioridades en mente, si nos está bajando) definen de una u otra forma nuestra experiencia sexual de esa misma noche.
TRES: Lo más importante, un prejuicio que debemos dejar al lado de inmediato es que no importa tanto el desempeño sexual que creemos tener en la cama ni la forma en la que hicimos tal o cual movimiento, esta o aquella posición, sino CÓMO nos sentimos al respecto.
*Foto: TMRW Magazine.
Para terminar, una idea revolucionaria y con miras a ese empoderamiento que propone la andróloga venezolana MarÃa Fernanda Peraza, creadora de la página web GetMine Healthy Pleasure que contiene guÃas sobre el orgasmo y artÃculos de sexualidad: «El orgasmo y otras formas de placer deben ser responsabilidad de la propia mujer, que mientras tenga más información, tendrá más poder para sentirse bien».
PodrÃa interesarte:

¿Fumas marihuana? 4 mitos sobre sus efectos en tu mente y tu vida sexual.
éste es el secreto de una vida sexual feliz, según un estudio.