Durante años, escuchamos frases burdas como “los ojos son la ventana del alma” o “lo veo en tu mirada”. Las personas pueden adivinar los sentimientos o estados de ánimo de los demás con verlos a los ojos. Es cierto que muchas veces lo más elemental, como el enojo o la alegría, se manifiestan en el brillo ocular o sencillamente en las lágrimas. Sin embargo, pensar en cosas como “se te ven los ojos de enamorado” resultaba absurdo. Hasta ahora.
Un estudio psicológico reciente demostró que científicamente hablando, sí es posible “leer las emociones” de las personas a través de los ojos. El trabajo “Leer lo que la mente piensa por cómo se ven los ojos” revela que la mirada humana expresa una gran cantidad de información social y emocional compleja.
Basados en la premisa de las dificultades que implica definir específicamente qué rasgos físicos de los ojos desvelan estados mentales, decidieron llevar a cabo experimentos con la hipótesis de que la percepción del receptor de dichos estados mentales está fundamentada en la apariencia expresiva de los ojos que sirve como una función óptica para el emisor.
Durante el experimento, sometieron a 28 voluntarios a alrededor de 600 pruebas, donde les mostraron imágenes de ojos “reflejando” diversas expresiones como tristeza, descontento, enojo, felicidad, miedo y sorpresa. Todos tuvieron que elegir “qué clase de palabra describía el estado mental de esa persona”.
De acuerdo con IFL Science, los científicos analizaron los resultados tomando en cuenta cómo la percepción de los participantes se relacionaba directamente con movimientos oculares específicos, como “la apertura de los ojos, la distancia que hay con respecto a las cejas, la curvatura de las cejas y las arrugas que se hacen alrededor de la nariz y debajo de los ojos”. Al final, los resultados confirmaron que casi todos los participantes seleccionaban respuestas iguales a las expresiones que estaban viendo. De manera generalizada, el estrechamiento de los ojos estaba fuertemente asociado con estados mentales relacionados con “discriminación social”, como el odio, la sospecha y la agresión.
Por el otro lado, el ensanchamiento ocular se asoció directamente con la sensibilidad, anticipación, cobardía y el interés que se puede tener por ciertas cuestiones.
Específicamente, los investigadores basaron sus estudios en el ensanchamiento o estrechamiento ocular, que “regula la sensibilidad contra la discriminación” y no sólo asociado con las emociones “básicas”, sino también con “estados mentales complejos que comunican ambos estados”.
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