El menú es sencillo: hamburguesas, perros calientes, golosinas en forma de frutas y dulces de muchos colores servidos en recipientes de plástico en tonos neón, pero sobretodo, destaca el logo del café planchado sobre los bollos de pan. En el diseño del sitio no existe la menor duda de la influencia de Andy Warhol, un lugar lleno de color, cultura norteamericana y toda la esencia del Pop art.
De Andy Warhol, se decía, quería ser un hombre de plástico. Configuró su vida de manera artificial; sus apariciones en fiestas, su selección de vestuario y sus amistades no fueron producto de la casualidad. Para él todo funcionaba en una suerte de fantasía en la que su papel del héroe norteamericano, hijo del jet set, lo hacía protagonista de la escena de aquella época. Extravagante y redentor, un mito en la historia del arte, justo como esta cafetería, pensada hasta el más mínimo detalle en el estilo del artista.
Con esta cafetería, ideada por el Museo de Arte Contemporáneo Mori en Tokio, el recinto celebrará su décimo aniversario de una manera muy americana. El espacio recoge al ícono pop art por excelencia, y monta una exposición especial de las obras de arte más representativas de Warhol. Parte complementaria de esta muestra es un café dinámico llamado “Café pop-up”, inspirado en este movimiento neoyorkino.
El nuevo restaurante está situado en Roppongi Hills, en Tokio, justo en la cima, lo que lo hace tener una vista muy peculiar de la ciudad. Este lugar es uno de los más famosos de Japón, y ahora, con este concepto de Café- exposición, ha llamado la atención de miles de personas.
La exposición y la cafetería podrán visitarse hasta el próximo 6 de mayo. El Museo de Arte Mori es un tipo de construcción sin precedentes y la joya de la corona del nuevo barrio de Roppongi Hills, en Tokio. En el piso 53 de la torre es donde se aloja el museo que no exhibe una colección permanente, sino exposiciones temporales de obras de artistas contemporáneos.
Inaugurado en 2003, cuenta con el estado de la técnica de galerías, iluminación natural controlada y la mejor vista de Tokio. Hay innovadoras exposiciones de artistas emergentes y consagrados de todo el mundo que se muestran cuatro veces al año, con espectáculos anteriores centrados en el arte contemporáneo asiático, africano y japonés.