La mayoría de los jóvenes acuden a la escuela para poder obtener mejores oportunidades y tener una vida más plena, sin embargo, un estudio de la OCDE reveló que el sistema educativo mexicano los prepara sólo para convertirse en empleados. En pocas palabras: México crea mano de obra y no empleadores.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) realizó el estudio llamado “Perspectivas económicas de América Latina 2017: Juventud, competencias y emprendimiento”, y sus resultados no parecen ser muy favorecedores para los jóvenes de México.Según lo revelado por el estudio, los jóvenes mexicanos están estudiando sólo para convertirse en empleados y están optando por cursar carreras técnicas que los preparen para ser mano de obra y los aleja del camino del emprendimiento.
Usan esta alternativa porque es la única que el sistema educativo mexicano les brinda con el afán de evitar la deserción escolar a nivel medio superior y superior.En consecuencia, la opción de emprender, es decir, crear sus propios negocios o empresas, en México es la que registra un menor crecimiento que en toda América Latina y el Caribe.
Pero no sólo es por la cuestión de optar por carreras técnicas, sino que también influye que nuestro país registra obstáculos más altos que el promedio de los países que pertenecen a la OCDE.Los jóvenes mexicanos que quieren arrancar su propia empresa o negocio se enfrentan principalmente a los reglamentos que protegen en gran medida a los grandes corporativos y a la inmensidad de trámites y cargas administrativas requeridas para hacer funcionar su proyecto legalmente.Para entender esto de mejor manera, veámoslo reflejado en números.En México, el 5 % de los jóvenes entre 14 y 29 tienen un trabajo que ellos mismos crearon, mientras que el promedio de América Latina es del 16 %. De esos pocos jóvenes que generaron su propio trabajo en México, sólo el 2 % da empleos a otras personas.Otro dato importante es que, aunque el país está apostando por crear trabajadores y no empleadores, el presupuesto que le asigna a la capacitación laboral es el más bajo de toda América Latina y la OCDE.
Latinoamérica promedia el 0.12 % de su Producto Interno Bruto, la OCDE el 0.15 %, mientras que México sólo asigna el 0.04 % de su PIB.
Aunque no todo es malo, pues también reporta que de los jóvenes de entre 18 y 29 años que deciden emprender en México, sólo el 17 % lo hacen por necesidad, mientras que el promedio en América Latina es de 26 %.Algo que no ha entendido el gobierno mexicano es que la educación no debe verse sólo como el medio para poder conseguir un empleo, sino crear personas que sean aptas para utilizar sus conocimientos para el bien propio y de todo el país.
Apostarle a la creación de empleados y no de empleadores a largo plazo resultará contraproducente, pues la economía no avanzará por la falta de creación de nuevas empresas que a su vez puedan dar trabajo a más personas.
Este estudio debería servir para replantear la estrategia y el modelo educativo mexicano, por el bien del país y del futuro de los jóvenes.
*Con información de OCDE y El Universal