Hace apenas unos días, un video donde una joven norcoreana describe las dificultades que implica vivir en un país donde la censura, el abuso de poder, la corrupción y la falta de derechos humanos, son una constante que se hizo viral y causó la indignación de miles de personas en el mundo.
Hace dos semanas, ese mismo país detonó su quinta bomba atómica como una prueba de su poderío militar. En respuesta, Estados Unidos mandó un grupo de bombarderos demostrando que están preparados para combatir cualquier tipo de amenaza. Hay que recordar que el gobierno dirigido por Kim Jung-un es uno de los más dictatoriales que existen actualmente. Un claro ejemplo es la ley que impide utilizar el sarcasmo a hacer referencias del gobierno o de las autoridades del país asiático que el gobierno Kim Jung acaba de instaurar. Pero no sólo Estados Unidos se encuentra preparado para enfrentar al mandatario norcoreano. En una sesión parlamentaria celebrada el miércoles pasado, el ministro de defensa de Corea del Sur admitió que están considerando activar una unidad de fuerzas especiales para que asesinen al líder norcoreano en caso de que estos intenten lanzar un ataque nuclear en contra de su vecino del sur. La declaración salió a la luz después de que un diputado surcoreano preguntara en la asamblea, si los rumores de dicho proyecto eran ciertos.
El plan se encuentra incluido en un proyecto titulado “Castigo y Respuesta Masiva Surcoreana” y prevé que en caso de una amenaza inminente , Seúl respondería con un ataque preventivo que incluiría el lanzamiento de misiles de alta precisión como el envío de unidades especializadas entrenadas. A su vez, el proyecto “Castigo y Respuesta” forma parte de una estrategia militar que incluye activar el escudo antimisiles ya existente y un sistema alterno de ataques preventivos a cargo del Mando Conjunto EUA-Corea del Sur, conocido como “Kill Chain”.
Aunado a estas medidas, tanto Corea del Sur como Estados Unidos preparan un avanzado escudo antimisiles para el país del sur conocido como THAAD.
Todas estas precauciones se deben a que la última prueba nuclear realizada por el gobierno norcoreano, ha sido la más potente hasta ahora.
Además al gobierno de Kim Jung-un parecen no importarle las sanciones impuestas por la ONU, pues la pruebas continúan y cada vez son más exitosas.
*Con información de: El País y Infobae.