Una organización estadounidense estima que la nación asiática dirigida por Kim Jong-un desarrollará en los próximos 4 años casi un ciento de armas nucleares en Norcorea.
La “think tank” (una institución de investigadores) Rand Corporation, ubicada en los Estados Unidos, ha estudiado durante los últimos meses, el comportamiento de los ejercicios que el gobierno de Corea del Norte ha llevado a cabo en la península asiática.
Sus conclusiones podrían afectar el curso de los próximos años. Según la estimación a la que llegó la organización, en 2020 los norcoreanos contarán con 100 armas nucleares que podrán usar en cualquier momento.
Eso incluye una serie de misiles nucleares que podrían ser una amenaza inminente en puntos específicos del otro lado del Océano Pacífico.
En el reporte de la institución, una de las más respetadas en estos temas, se advierte que, no importa quién resulte ganador de las próximas elecciones en Norteamérica, la política con respecto a Corea del Norte deberá ser revisada y actualizada para enfrentar el desarrollo nuclear de un país con un líder autoritario.
El reporte señala a dos responsables principales de haber fallado en todos los intentos por contener la amenaza de una nueva potencia nuclear: Corea del Sur y Japón. El arsenal al que aspira tener Kim Jong-un en los próximos años, podría ser el desafío más importante del siglo.
El reporte es claro acerca del programa nuclear norcoreano: “en menos de cinco años tendrán la capacidad de invalidar todos nuestros esfuerzos en la región y amenazar directamente la estabilidad y seguridad de los aliados estadounidenses”.
Una de las últimas pruebas realizadas en la nación asiática podría haber sido del tamaño de la bomba que se lanzó sobre Hiroshima, en 1945. Eso indica que los recursos de transporte y almacenamiento les permite tener entre 13 y 21 armas con capacidad nuclear actualmente. En 2020, el número aumentaría hasta llegar a 100 armas nucleares. Entre 2020 y 2025, podrán disponer de todas ellas.
“Es un momento crítico”, se advierte en el informe. En caso de que Corea del Norte ataque Corea del Sur o Japón, los Estados Unidos y China podrían verse arrastrados a una batalla en la que nadie quiere participar.
*Con información de: international Business Times, The Guardian, Daily Caller, Foreign Policy, Huffington Post.