Nota del editor: Información actualizada al 2021
Corrina Williams se lo decía a ‘Smash’, su hijo: “debes tener siempre la mente fija en tu objetivo; sin pasar sobre los demás y trabajando duro, llegarás un día a la NFL”. Sobresalir en las Panteras de Dillon y conseguir después una beca completa en una universidad importante para así saltar a la liga estadounidense de futbol, era el objetivo de Smash en la serie Friday Night Lights, producida por Brian Grazer, lanzada al aire en 2006.
Este objetivo no sólo lo tenía ‘Smash’ en la serie. También lo tienen cientos de jugadores colegiales que buscan sobresalir y cumplir su sueño: jugar en la NFL. Rashad Fenton, cornerback -esquinero, pues- de los Jefes de Kansas City, no sólo logró llegar a un equipo de la NFL vendiendo pizzas. Ahora está a nada de jugar un Super Bowl.
Vender pizzas, el escalón para la NFL
En entrevista para Alejandro Zenteno, de TUDN, Rashad Fenton declaró que trabajó vendiendo pizzas en el estadio para conseguir su objetivo: jugar para la NFL. “Solía trabajar en noveno y décimo grado en high school en Miami y ellos nos hacían trabajar después de los partidos de viernes por la noche, ya sea sábado o domingo, sin importar qué equipo jugara”, contó Rashad.
Y no importaba, en efecto cuál equipo jugara en el estadio que albergará este domingo el Super Bowl que él disputará con los Jefes de Kansas City en contra de los Bucaneros de Tampa Bay. “No importaba cuál jugara, podría ser un equipo de futbol, o la Universidad de Miami o los Dolphins. Nosotros teníamos que ir a los locales concesionados a hacer pizza, era un trabajo normal de concesión”, relata Fenton.
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¿Imaginas jugar en el estadio en donde vendías pizza?
Así como Corrina se lo decía a ‘Smash’, seguro alguien se lo mencionaba también a Rashad Fenton: “no pierdas de vista tu objetivo”. Pasar de vender pizzas en el Hard Rock Stadium, a jugar ahora un Super Bowl, es algo que no le pasó por la mente al jugador de los Jefes. Esto le sucedió apenas el año pasado y ahora repetirá un gran juego más.
“Es irreal, sé que Dios es bueno, Dios es grandioso, es un honor. Estoy tomando todo el evento como una oportunidad porque tal vez era mi destino”, dice emocionado Rashad al tiempo que cuenta que serán entre cinco y seis personas irán a verlo jugar este domingo. “Ellos están súper orgullosos de mí, no conversamos mucho, sólo poco tiempo y todos están orgullosos de mí honestamente”, sentenció.
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Foto de portada: Sports Illustrated.
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