Querían venderla en 500 millones de dólares, una cifra bastante ambiciosa tomando en cuenta los escándalos sexuales que la rodeaban. Weinstein Company, la casa productora del que fuera uno de los más famosos creadores en Hollywood, Harvey Weinstein, se declaró en bancarrota.
Y no es para menos. Después de darse a conocer que Weinstein abusó de decenas de mujeres, la empresa no pudo recuperarse y mucho menos consiguió que algún grupo inversor se interesara en adquirir sus activos.
Era la firma de inversionistas liderada por María Contreras-Sweet la interesada en adquirir la productora de Weinstein, pues quería conformar un consejo únicamente con mujeres, pero después de la demanda por conducta sexual inapropiada interpuesta por el fiscal general de Nueva York, Eric Schneiderman, se cayeron las negociaciones.
Gwyneth Paltrow formó parte de las mujeres afectadas por el comportamiento de Weinstein. (Foto: Consequence of sound)
¿Qué fue en realidad lo que terminó por dar al traste con el interés de María Contreras-Sweet hacia Weinstein Company? Las investigaciones realizadas por Schneiderman revelaron, después de cuatro meses, que el productor contrataba a un grupo de mujeres que se encargaba de acompañarlo a distintos eventos y que también lo ayudaban a concretar sus conquistas sexuales.
Compensar a las víctimas también fue un problema que encontró el grupo de inversionistas. «Si algún comprador quiere hacer lo correcto, debe compensar y proteger a las víctimas», indicó el fiscal de Nueva York. Fue a través de un comunicado publicado en los diarios San Francisco Chronicle y Los Angeles Times que se dio a conocer la condición de quiebra de Weinstein Company.
Los inversores liderados por María Contreras-Sweet no salvaron a Weinstein Company de la bancarrota. (Foto: USA Today)
«La compañía Weinstein intentó una venta activa con la esperanza de preservar los activos y los empleos. Hoy esas conversaciones concluyeron sin lograr firmar un acuerdo», indicaron en Weinstein Company. «El único camino viable y la mejor opción para maximizar el valor de la compañía es un proceso ordenado de bancarrota».
El proceso de demanda contra Harvey Weinstein, su hermano Robert y el consejo de administración de Weinstein Company, comenzó el 11 de febrero después de indicar el fiscal de Nueva York que las prácticas de los involucrados violaban de manera flagrante los derechos civiles.
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