Apenas tenía 17 meses de haber llegado a este mundo. Su destino estaba en Venezuela, una nación que pese a su calidez humana, ha padecido de episodios más que violentos en los últimos años, uno de los más severos, este 2017. Kenyerber Aquino Merchán falleció de hambre.
En brazos, Kenyerber era cargado por su papá. Sus costillas y las espina dorsal se le notaban cuando entregó el cuerpo a un trabajador funerario, cuya función es hacer visitas a domicilio para aquellas personas que no pueden costear un funeral.
Kenyerber falleció a los 17 meses por falta de comida en Venezuela. (Foto: Meridith Kohut, The New York Times)
La escasez de alimentos, tienen a Venezuela en una crisis sin precedentes, en un suceso que documentó The New York Times, en el que se percataron que son los niños los más afectados ya que se mueren de hambre en mayor cantidad, dentro de los hospitales venezolanos.
Fueron cinco los meses que tuvo el diario estadounidense de documentar el trabajo en 21 hospitales públicos de Venezuela. Los doctores dijeron a los periodistas que la desnutrición severa en niños estaba matándolos, rebasando incluso cifras de fallecimientos de menores de edad por falta de alimentación.
Los niños con severa desnutrición están llenando los hospitales venezolanos. (Foto: Meridith Kohut, The New York Times)
Apenas en 2016, los diputados de la oposición revelaban que al día morían 28 niños por desnutrición pero ese es un dato que el gobierno liderado por Nicolás maduro no quiere reconocer. Actualmente, los médicos dicen que las cifras escandalosamente se duplicaron y que nadie hace nada para evitar estas muertes, que se presentan en su mayoría en niños menores de cinco años.
«Los niños están llegando con unas condiciones muy precarias de desnutrición. Estamos viendo cuadros de desnutrición tan extrema como la que llega a presentarse en campos de refugiados», indicó al New York Times el doctor Huníades Urbina Medina, presidente de la Sociedad Venezolana de Puericultura y Pediatría.
Según la oposición, en 2016, cada día murieron 28 niños por falta de alimento. (Foto: Meridith Kohut, The New York Times)
Pero no sólo en los hospitales se nota lo que la crisis de alimentos está haciendo contra la población venezolana. En las clínicas de esterilización, las mujeres acuden para evitar embarazos y, cuando los niños se dan cuenta de que en casa no hay comida, se unen a pandillas para escarbar en donde puedan y así encontrar un poco de alimentos.
Tanto el Ministerio para la Salud como el Instituto Nacional de Nutrición de Venezuela no han dado declaraciones al respecto, contrario a la oposición, quienes afirman que «tenemos un pueblo que se está muriendo de hambre».
Quienes logran sobrevivir, se juntan para buscar comida hasta en la basura. (Foto: Meridith Kohut, The New York Times)
Bebés como Kenyerber, mueren porque sus padres no tienen cómo alimentarlos. En el caso de este pequeño, su madre se contagió del virus del Zika y no lo podía amamantar. Murió al no conseguírsele alimentos necesarios y baratos para subsistir sin la leche materna. Las imágenes son desgarradoras, pero resulta aún más impotente que viendo cómo la población se muere diariamente, el gobierno que los lidera no haga nada por evitarlo.
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