El inesperado giro en la boda del empresario Eder Meneguine causó revuelo en la prensa brasileña, debido a que terminó con su prometido un día antes de sus nupcias, y llegó al altar con su exnovio.

Meneguine, de 60 años de edad, discutió con su prometido horas antes del gran evento, y terminaron su relación, pero decidió mantener la boda en pie para llegar con un nuevo protagonista.

Un día antes, el prometido dio positivo a covid-19, sin embargo, se dio cuenta de que ya no se iba a casar porque Meneguine decidió continuar con la boda, ahora con su exnovio, en una evento conocido por su lujoso y excéntrico presupuesto.

De acuerdo con los diarios Correio y G1, Eder, quien es un reconocido empresario y ex arquitecto, ya había anunciado sus nupcias por el joven Dyl Reis, de 23 años de edad, hasta que descubrió una infidelidad.

Incluso se les dijo a los invitados que la noche sería inolvidable. Lo que nadie imaginaba es que la gran noticia sería el cambio de novio. La invitación enviada a 120 personas incluía el nombre de Dyl Reis, pareja de Meneghine en los últimos meses. Sin embargo, quien subió al “altar” para decir el “sí” fue su ex novio, el chef Hugo Oliveira, de 44 años.

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‘Fue 10 veces mejor’

Eder gastó más de 50 mil dólares, en un hermoso salón, en dos DJ y en un lujoso catering para complacer a sus invitados.

Todo estaba listo para la gran fiesta, pero 24 horas antes, la pareja tuvo una fuerte discusión al tal grado que provocó la repentina separación, pero a Eder no le importó y sabía que el “show debe continuar”.

En tan corto tiempo, el protagonista debía encontrar a un rápido reemplazo, así que llamó a su ex novio, el chef Hugo Oliveira, con quien siempre mantuvo contacto como amigo a pesar de la ruptura. Cabe mencionar que Oliveira y Eder vivieron juntos por más de 20 años.

La respuesta en el altar fue un robusto “sí”, frente a los invitados. Eder dijo que la gente se volvió loca. “Hubo gente desmayada, más de 20 minutos de aplausos, una vibración con sombreros en el aire. éxtasis total. La fiesta fue 10 veces mejor de lo que hubiera sido. Fueron ocho horas de evento y 150 botellas de vino espumoso italiano”, dijo.

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* Foto de portada: G1.