Luego de conocerse que 2022 fue el sexto año más cálido desde 1880, científicos estadounidenses afirman que el mundo necesita ‘líderes fuertes’ que sean más exigentes en la reducción de emisiones para no ‘robarle el futuro’ a las nuevas generaciones.
‘La ciencia es clara: la acción transformadora a gran escala es el único camino a seguir’, declaró Rachel Licker, científica climática principal de la UCS.
Licker habló en nombre de la UCS en referencia a los estudios sobre las temperaturas mundiales en 2022 realizados por la Administración de los Océanos y la Atmósfera y la Administración Nacional del Espacio y la Aeronáutica que muestran que la Tierra sigue calentándose.
El 2022 el año más cálido desde 1880
Según el análisis de la NOAA, 2022 fue el sexto año más cálido registrado desde 1880, pero además los últimos nueve años (2014-2022) están entre los 10 con temperaturas más altas de la historia.
“La gente en los Estados Unidos y en todo el mundo experimentó una devastación desgarradora por la crisis climática durante el último año como resultado de olas de calor, sequías, tormentas e incendios forestales sin precedentes”, subrayó Licker.
La científica advirtió que los nuevos datos de la NOAA y la NASA están en línea con las tendencias de calentamiento global a largo plazo que ‘continuarán empeorando a menos que las emisiones se reduzcan drásticamente, mucho más de lo que están haciendo actualmente los Estados Unidos y otros grandes emisores’.
A su juicio, si los objetivos de las políticas actuales de respuesta a las crisis climática no se elevan ‘significativamente’, está ‘casi garantizado’ que ‘se superarán los puntos de inflexión irreversibles’.
‘Además, se necesita hacer más para garantizar que las personas, las economías y los ecosistemas que se encuentran en la primera línea de la crisis climática reciban inversiones adecuadas para reforzar su resiliencia’, dijo la representante de UCS.
Licker pidió ‘no ceder ante los intereses de la industria de los combustibles fósiles’ y subrayó que se necesitan ‘líderes fuertes dispuestos a implementar políticas climáticas audaces para el mejoramiento de las personas y el planeta’.
Según la declaración, los formuladores de políticas reacios a ir más allá y las empresas que se involucran en el lavado verde están, ‘francamente, robando el futuro que legítimamente pertenece a nuestros hijos’.
Además de este informe sobre temperaturas, la NOAA publicó esta semana su informe anual sobre el costo humano y económico de las inclemencias y desastres climáticos en EE.UU., que indica que se perdieron 474 vidas y un total de 165.000 millones en daños materiales.
Según esas cifras, 2022 fue el tercer año más costoso y el octavo más mortífero.
Con información de EFE*