Y entre más se den a conocer los detalles del caso de Rosa Isela, en Veracruz, más nos hacemos preguntas sobre lo que debe tener la gente en la cabeza para cometer esta clase de atrocidades y creer que pueden seguir con su vida como si nada. Muchos dicen que la impunidad que hay en el país cuando se cometen este tipo de crímenes -y muchos otros delitos más- es lo que les permite pensar que no recibirán nunca un castigo o que sean siquiera capturados. En este caso, las autoridades capturaron a los presuntos responsables.
Fue Cuitláhuac García, el gobernador de Veracruz, quien dio a conocer que Verónica N, la presunta asesina de Rosa Isela, habría fingido un embarazo durante meses, para después contactar a la joven, quitarle la vida y sustraerle a su bebé. Además, pagó 10 mil pesos a su cómplice para que él terminara con la madre y extrajera a la niña de su vientre.
Verónica íNí fingió embarazo y se contactó con Rosa Isela en redes
De acuerdo a las primeras investigaciones, Rosa Isela hizo contacto a través de Facebook con Verónica, quien usó un perfil falso, haciéndose pasar por una mujer de 60 años que quería regalarle ropa para su bebé, la cual estaría próxima a nacer, pues la joven de 20 años tenía ocho meses de gestación. Ese mismo tiempo, fue el que Verónica engañó a su familia, haciéndoles creer que estaba embarazada.
Lo tramó durante ocho meses cuando empezó a fingir el embarazo. Con mucha alevosía, astucia, que van a ser agravantes ahora, por lo que cometió, declaró Cuitláhuac. Fue el 30 de noviembre cuando Verónica se presentó en un centro médico de la Cruz Roja cubierta de sangre y con una bebé en brazos. El gobernador de Veracruz afirmó que ella quería darse de alta rápido, antes de que le puedan hacer más estudios.
Tres días después, y luego que Lizbeth, hermana de Rosa Isela denunciara su desaparición y organizara una manifestación en el Zócalo de Veracruz, las autoridades encontraron el cuerpo de la joven en un rancho a 25 kilómetros en donde se le vio por última vez. Rosa Isela no tenía ya a su bebé en el vientre.
Cuando se les detuvo, tenían consigo a una bebé
De acuerdo a las mismas declaraciones del gobernador, Verónica pagó 10 mil pesos a Gonzalo para que él le quitara la vida y también le sustrajera del vientre a su bebé. Ambos fueron detenidos cuando llevaban a la niña en brazos. Al momento de su detención tenían consigo a una menor recién nacida, la cual fue rescatada sana y salva y ya recibe atención de las autoridades correspondientes, anunciaron en voz de la Fiscalía de Veracruz.
Mientras continúan las investigaciones, la pequeña hija de Rosa Isela permanece en el DIF local y será entregada a su padre, según Cuitláhuac García. Este delito que se investiga como feminicidio, es uno de los tres que se cometieron en 48 horas en México. Martha Aurora, desaparecida en Nuevo León, fue encontrada recientemente. Ella tenía también ocho meses de embarazo, sin embargo, se le encontró sin que le hubieran sustraído a su bebé. Ana Lilia, de Querétaro, también fue asesinada en Querétaro. Ella también se encontraba embarazada y fue su pareja quien le quitó la vida a golpes.
Ref. El País.