En 2030, el PIB de México puede ser 15% mayor que el de 2020 si sumamos a 8.2 millones más de mujeres a la economía en los próximos 10 años. Si México no implementa una agenda de inclusión sustantiva y real, y mantiene su tendencia actual de incorporación de mujeres al mercado laboral, el PIB en 2030 solo sería 5% mayor. Más mujeres en la economía se traduce en: autonomía económica para más trabajadoras, mayores ingresos y ahorro para los hogares, mayor rentabilidad y talento para las empresas, y crecimiento para México. Para sumar a más mujeres en la economía se requiere que el gobierno implemente acciones como un sistema de cuidados infantiles universal y que el sector privado fomente inversiones y proyectos que incluyan a más mexicanas.
A todas y todos en México nos conviene tener a más mujeres con autonomía económica. El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) estima que, para 2030, el PIB podría ser 15% mayor que el PIB de 2020 si el gobierno y el sector privado implementan acciones para sumar a 8.2 millones de mujeres a la economía en los próximos 10 años.
La tasa de participación económica de las mexicanas es muy baja. Hasta antes de la pandemia, solo el 45% de las mujeres mayores de 15 años contaban con un trabajo o estaban en búsqueda de uno. La pandemia borró el escaso avance de los últimos 15 años, lo que representa toda una generación perdida.
Aunque en los últimos 10 años es posible identificar un avance en la participación política de las mujeres, sobre todo en los puestos de representación como legisladoras y secretarías de Estado debido a las cuotas de género, esto no se ha traducido en un mayor crecimiento de mujeres en el resto de las instituciones de gobierno. En 2019, solo el 18% de las titulares de las dependencias de la Administración Pública Federal fueron mujeres.
Por su parte, en el sector privado también hay una baja representación de mujeres, que se reduce aún más conforme ascienden los puestos directivos. Mientras que el 35% de la plantilla laboral de las empresas que cotizan en las bolsas mexicanas de valores son trabajadoras, solo el 1% de las direcciones generales están ocupadas por mujeres y representan solo el 9% del total de miembros de los consejos de administración.
El IMCO analizó la capacidad de México y de los otros países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) para atraer y retener a más mujeres en la economía. En contraste con sus socios, los mayores desafíos de México se relacionan con la distribución del trabajo del hogar y de cuidado, así como la participación en el sector privado.
¿Qué beneficios tiene sumar a más mujeres a la economía de México? El IMCO estima que si en México la tasa de participación económica de las mujeres fuera la misma que la del promedio de los países de la OCDE (56% registrada en 2019), para 2030 el país lograría:
Además, existe evidencia de que las empresas que suman a más mujeres, sobre todo en cargos directivos, tienen beneficios económicos, como:
Más mujeres en el mercado laboral se traduce en libertad económica para ellas y beneficios económicos para sus familias y el país. De no implementar una agenda sustantiva y real para la igualdad entre hombres y mujeres, y mantener la tendencia actual, México tardaría casi 60 años en alcanzar la tasa de participación económica promedio de los países de la OCDE.
Por ello se necesitan condiciones para que más mujeres entren, crezcan y permanezcan en el mercado laboral. Para lograrlo, el IMCO Propone:
El monitoreo de estos datos nos brinda evidencia para diseñar políticas públicas que beneficien a la #MujerEnLaEconomía. Descúbrelo en nuestro micrositio http://www.imco.org.mx/monitor