La despenalización del aborto es tema que se ha ido metiendo a la agenda política y mediática alrededor del mundo con mucha fuerza, pero socialmente todavía hay resistencia para aceptar el aborto legal.
Por cuestiones culturales, religiosas o ideológicas, el aborto es considerado un tabú. Según la encuestadora Parametría, en 2014 y hasta la fecha, un 67 por ciento de las personas encuestadas dijeron que rechazan que una mujer pueda tener un aborto sin ser penalizada.
La mujeres enfrentan mucha presión social por pensar en el aborto. (Foto: Archivo)
¿Por qué rechazan el aborto?
En entrevista para El Universal, Sofía Garduño Huerta, coordinadora del Fondo de Aborto para la Justicia Social MARIA, explicó que la educación es un factor muy arraigado en la oposición del aborto legal.
Crecemos rechazando el aborto y aceptando la maternidad. Cuando vives un momento en el que el embarazo no es viable, no solo le estás diciendo no a ese embarazo, sino también la educación que nos han dado.
Garduño Huerta señala que las mujeres enfrentan presiones sociales por ser identificadas como femeninas y frágiles, incapaces de ser autosuficientes.
Estamos formadas en un país en donde todo lo femenino está asociado a la dependencia, a la obediencia y al cuidado. Hay una visión de nosotras como incapaces de tomar decisiones, que necesitamos de tutela, y principalmente de hombres.
La cultura, la religión y la educación son contrapesos que sostienen la estigmatización del aborto. (Foto: Archivo)
La psicóloga agregó que la imagen de las mujeres se juzga bastante por el ideal de la maternidad.
También (en nuestra cultura) está muy valorada la maternidad, que se liga a la identidad femenina. Puede haber alguien muy exitosa en otros ámbitos de la vida, pero si no es madre o no tiene una pareja, hay una visión de que está incompleta.
Es muy común estigmatizar el aborto con argumentos como que interrumpir la vida de un ser humano es inmoral y hasta criminal, sin embargo para Garduño Huerta es claro, que la decisión de la madre que toma la decisión de abortar le corresponde ella y a nadie más.
Los pros y contras de un aborto son parte de una decisión personal que responde a una situación particular de la mujer y sobre la cual nadie puede opinar ni se puede generalizar. No se pueden enlistar argumentos a favor o en contra.
En la Ciudad de México la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo está vigente desde el año 2007. En la capital del país se han practicado más de 176 mil procedimientos.
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