El robo de combustible a Petróleos Mexicanos (Pemex) asciende hasta los 70 mil millones de pesos, dinero que duplica el presupuesto destinado para la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Tras la polémica por el presunto recorte a las universidades, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador reconoció que existió un “error” y mantuvo la misma cantidad que administraciones pasadas al destinar 34 mil 778 millones de pesos a la máxima casa de estudios del país.
Anualmente, los huachicoleros robaban en promedio cerca de 70 mil millones de pesos, sin embargo, la nueva estrategia del presidente consiste en poner fin a dicha fuga de dinero que creció de manera desmedida durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
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Estudiantes de la UNAM saludan desde una sede de la máxima casa de estudios en el extranjero. (Foto: UNAM)
De acuerdo con cifras difundidas por López Obrador, los huachicoleros se robaban un promedio de 800 pipas diarias mediante la ordeña de los ductos de Pemex, situación que fue creando un sistema paralelo de distribución de gasolina robada donde altos funcionarios, empresarios y narcotraficantes participaban.
“Imagínense si evitamos que se roben esos 65 mil millones, pues hay más presupuesto. ¿De quién es el presupuesto? Es del pueblo, por eso no podemos decir: ‘A mí que me importa’, o actuar con indolencia. No. Todos evitar aceptar el robo, la corrupción, eso se acabó”, dijo López Obrador el pasado 12 de enero en Ayala, Morelos.
Durante los sexenios de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto se perdieron aproximadamente 14 mil millones de litros, siendo los estados de Guanajuato, Puebla, Tamaulipas, Hidalgo y Veracruz los más afectados con el mayor número de tomas clandestinas y fugas de capital por robo de combustible, según datos de Pemex Logística.
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