Las casas de cultura, plagadas de exposiciones escolares y talleres insulsos de acuarela o macramé, suelen de pronto sorprender.
Y en estos días sorprende, por ejemplo, la muestra Yo soy, en el Centro Cultural José Martí, un triste espacio con ubicación privilegiada, a espaldas del Museo Mural Diego Rivera, a un costado de la Alameda Central, que ahora vale la pena visitar.
Do you ever imagine me naked? (Foto: Iran Dimas)
La exposición —organizada por Salvador Irys, promotor, bajo auspicio de Altarte A.C. & Arte Desarrollo El Milagrito— reúne a 12 artistas menores de 30 años con obras relativas al homoerotismo, entre pinturas, dibujos y, sobre todo, fotografías.
En lo general, la selección es destacada, pero sobresale el trabajo de tres de ellos que no hay que perder de vista: Kevin Vásquez, Alberto Rebelo e Iran Dimas, cuyas piezas bien podrían estar colocadas en las salas de cualquier galería top de la ciudad.
Eternité. (Foto: Alberto Rebelo)
Tienen algo en común, además de ser fotógrafos: una escuela cercana a los lenguajes de la moda, pero aquí es el cuerpo y la actitud la confección retratada; la confección carnal.
Vásquez exhibe dos fotografías, Simulación y Frente a él, ambas protagonizadas por un chico común que exhibe su desnudez dentro de un salón de clases, entre una instalación casi escultórica de pupitres, en el primer caso, y sobre el escritorio del profesor, en el segundo. Hay un aliento de despertar sexual en ambas fotos, y un tufo celestial.
Do you ever imagine me naked? (Foto: Iran Dimas)
Rebelo presenta tres imágenes de su serie Eternité. Su chico es guapo hasta la aburrición, pero el tratamiento del fotógrafo, entre barridos y sobreexposiciones, por ejemplo, trastoca la perfección para traerla de vuelta redimida.
Dimas es el más arrojado de los tres con respecto a la temática. Su serie Do you ever imagine me naked? de fotografías instantáneas son un gran ejemplo del softporno bien hecho, lo mismo que otra imagen en formato mediano que también presenta: Rodderick poniendo música. En su obra hay algo de Ren Hang sin la teatralidad. Lo suyo, al contrario, es la naturalidad.
La obra de Vásquez y Dimas, por cierto, podrá verse también en otra colectiva que abrirá en los próximos días: Corporis, en SCS Fotográfica, a inaugurarse este viernes 13.
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