Luego de que se diera a conocer el hackeo que había sufrido la Sedena por parte del grupo identificado como “Guacamaya”, el presidente Andrés Manuel López Obrador, minimizó la información que comenzó a filtrarse sobre su salud, alegando que esa información era de dominio público y que no había ocultado nada. Sin embargo, también se dio a conocer la divulgación de información de seguridad nacional relacionada con el combate a la delincuencia organizada y grupos armados, cosa que no mencionó en su conferencia mañanera cuando confirmó el hackeo a los servidores de la Sedena.
Ante esto, se siguen conociendo detalles sobre los correos extraídos, en esta ocasión se divulgó información de inteligencia generados por comandancias y zonas militares que revelan que el Ejército sigue de cerca las actividades de feministas y activistas que luchan en favor de los derechos de las mujeres. Y no nada más sobre sus actividades, si no también que las mantienen en vigilancia y las colocan a la par de grupos subversivos, anarquistas y guerrillas que hay en el país.
Las tienen vigiladas e identificadas
Los reportes, que están dentro de los cientos de miles de correos electrónicos extraídos de los servidores de la Sedena por el grupo “Guacamaya”, detallan los nombres de las colectivas que ya se tienen identificadas, así como que tienen datos y fotos de las líderes de algunas de esas colectivas con sede en CDMX y Guadalajara. La Sedena identifica la existencia de 15 colectivos feministas relevantes en la Ciudad de México, entre ellos:
De igual manera, en un documento que fue enviado al Centro Coordinador de Fusión de Inteligencia Militar, de parte de la Zona Militar 1, con cede en Ciudad de México, se detallan no nada más los nombres arriba mencionados, si no también las acciones como la ocupación de la sede de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en el centro de la capital del país. En este evento identifica con su nombre completo y alias a 11 mujeres del Bloque Negro. Otra comunicación en poder de la Sedena, fechada en diciembre de 2020 y que le fue compartida por la mesa de coordinación de seguridad en Puebla, brinda información específica sobre la creación del colectivo Brujas Sufragistas. Ahí se identifica, con nombre y fotografía, a las principales integrantes del grupo y a sus aliadas en la Ciudad de México y en Guadalajara. El documento pone especial atención en sus redes sociales como medio de enlace, comunicación y movilización.
Contrario a lo que el gobierno pudiera decir, con éstas filtraciones de información que el Ejército mexicano ha estado manejando durante varios años, se da a conocer que así como sucedió en 1968 y en la década de los setenta durante la Guerra Sucia, hoy el Ejército vigila los movimientos de las organizaciones sociales y a los ciudadanos que se movilizan con diversas demandas.
Ref. Latinus
