“Hace un tiempo este sujeto, édgar Eloy, tatuador de la colonia Caracoles, abusó de mi hermana tocando sus senos y tratando de lamérselos, sabiendo que ella era menor de edad. Sé que si él lo hizo de una manera tan confiada y descarada, es porque estoy segura que no es la única a la que le ha hecho esto”.

Esta es la primera de, por lo menos, 17 denuncias de presuntas violaciones y abusos sexuales por parte de un tatuador de Tlalnepanta a quien identifican como édgar Eloy, las cuales se dieron a conocer a través de la colectiva feminista Vikingas CDMX.

‘Me besó y agarró los pechos’

A través de la página de la colectiva feminista Vikingas CDMX, se dio a conocer una denuncia sobre presunto abuso sexual de un tatuador de Tlalnepantla identificado como édgar Eloy, sin embargo, luego de difundirse la primera historia, comenzaron a llegar más testimonios de mujeres que también compartieron revelaciones de presunto acoso, abuso y violación.

“El año pasado, exactamente en el mes de octubre, fui a tatuarme al local de édgar Eloy; me tatué el glúteo y aprovechó para meterme mano y besarme el glúteo; cuando terminó, me besó y agarró los pechos. En su momento no lo pude decir, pero ahora lo digo para que no le pase a ninguna otra”, relata la segunda historia de, por lo menos, 17 más que se han compartido en el perfil de la colectiva feminista.

Además de clientas de Eloy, también existen testimonios de mujeres que en su momento colaboraron con el tatuador como asistentes, una de ellas fue sometida, presuntamente, a realizarle sexo oral cuando tenía 14 años. “Estando en el estudio con la cortina cerrada, me empujó hacia una camilla que era para tatuar a los clientes y me empezó a besar. Bruscamente se sacó su miembro y me hizo practicarle sexo oral. Que no quede impune, yo tenía 14 años”, revela otro testimonio compartido en la página.

édgar Eloy se defiende

Con un video que subió en sus redes sociales, el tatuador se defiende de las acusaciones. “He estado recibiendo muchas publicaciones sobre que yo soy una persona indecente. Me da un poquito de pena el que la envidia de que mi trabajo esté funcionando, de que tengamos mucha gente aquí trabajando, de que nos va bien y hablen bien de nosotros… Por unos cuántos comentarios de no sé quién porque todos son anónimos, mucha gente me cataloga como un violador, cosas con las que no tengo que ver”, dice el tatuador.

‘No se dejen llevar’

“Yo jamás he tenido un percance con nadie, he respetado a toda la gente que ha trabajado aquí”, declara Eloy quien además presenta a las mujeres que trabajan con él actualmente y quienes han indicado que nunca se ha sobrepasado con nadie. “él siempre ha sido una persona muy respetable con sus clientas, con sus empleadas. No he visto que se comporte de una manera indecente. No es justo que por envidia dañen su moral, este negocio siempre ha sido familiar”, dice una mujer identificada como Celeste.

Usiel Ramos, identificado también como hijo de édgar Eloy, indicó en redes sociales que personas que quieren dañar a su padre se están aprovechando del movimiento feminista para hacer estas denuncias falsas. “Mi papá jamás en la vida cometería un abuso sexual y mucho menos una violación. Unas personitas supieron aprovecharse de la situación que está pasando, el movimiento feminista y eso de verdad es repugnante”, indicó.

“No se dejen llevar. No sé qué está pasando y lamento todo esto, ojalá todo se solucione de la mejor manera”, finaliza édgar Eloy.

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Foto de portada: Cultura Colectiva News.

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