¿Quieres un lugar para escribir una buena y muy impactante novela o serie de televisión policiaca de intriga palaciega y corrupción de altos vuelos? Vete a Brasil. ¡Ups! No, ya te lo ganaron. Bueno, seguro que en México también encuentras mucho material.
Hace no mucho en la historia de la humanidad, la ficción solÃa ser profética como las Veinte mil leguas de viaje submarino de Julio Verne en el siglo XIX o el vigilante y omnipresente Big Brother que visualizó George Orwell en su novela 1984, publicada en 1949.
Tristemente, hoy la ficción funciona más para llenar los huecos que nos permitan entender las complejidades de la realidad actual y sus miserias.
Allá en Brasil, la trama está al rojo vivo. Un mega escándalo de corrupción que tiene señalada a toda la clase polÃtica oficialista, opositora y hasta extranjera; el expresidente más popular encarcelado por ese mismo embrollo y con posibilidades cada vez más pequeñas de postularse otra vez; el paÃs dividido en bandos y hundido en la peor recesión económica de su historia. ¿Asà o más?
Odebrecht provocó un escándalo mundial de corrupción que ha derribado gobiernos. (Foto: T13)
No es ficción. Los brasileños lo conocen como el caso Lava Jato: 10 mil millones de dólares desviados de Petrobras que sirvieron para financiar campañas polÃticas y otras maniobras muy sucias como sobornos multimillonarios en los que también está envuelta la constructora Odebrecht, que corrompieron a muchos gobiernos de naciones vecinas y hasta lejanas. Un cochinero asqueroso, digno de una gran novela.
El periodista Vladimir Netto, muy prestigiado en tierras brasileñas, hizo lo propio de su oficio: una investigación de fondo que plasmó en el libro Lava Jato – O juiz Sergio Moro e os bastidores da operação que abalou o Brasil (Lava Jato – El juez Sergio Moro y la operación entre bastidores que sacudió a Brasil), convertido allá en todo un bestseller que no se resistió a escribir en el tono de un thriller policiaco.
¿Y entonces la serie, apá? El afamado productor José Padilha, conocido como uno de los creadores de Narcos, tomó el libro y junto con la guionista Elena Soarez, se tomaron algunas licencias literarias, hicieron la adaptación libre, cambiaron los nombres y con eso crearon El Mecanismo, producción de ocho episodios que ya puede verse en Netflix desde hace algunas semanas, incluso doblada al español.
(Video: Netflix América Latina vÃa YouTube)
La trama da para muchas posibilidades. En este caso, la realidad sà rebasa a la ficción. Como género audiovisual, sólo hubo que asegurarse de que el pacto ficcional que existe ancestralmente entre el creador de un contenido y quien lo consume fuera absolutamente respetado. Ese pacto tiene por lo menos 5 reglas, dirÃa que no escritas, pero entonces cómo vas a leerlas:
– El lector o televidente suspende la incredulidad ante lo que está viendo.
– El espectador acepta que lo que se cuenta en el contenido son hechos imaginarios, pero no mentiras.
– El autor entiende que su audiencia no piensa ni imagina como él.
– El creador desaparece mientras su obra es vista o leÃda.
– Congruencia, por ejemplo, el espectador acepta que un lobo hable, pero exige que actúe como se supone lo haga un lobo.
En este pacto, las narrativas policiacas tienen además tres particularidades:
– El autor tiene que dar al televidente o lector todos los datos necesarios para que pueda resolver el caso por sà mismo.
– El villano no puede ser el narrador a menos que el autor rompa esta regla.
– Se permiten las casualidades y golpes de suerte normales de la vida, pero la solución no puede ser mágica ni sobrenatural.
Si ves la serie, vas a sorprenderte de cómo todas las reglas del pacto ficcional se cumplen en una trama tomada de sucesos reales sin ningún problema y compite perfectamente con historias con menor verosimilitud como House of Cards o Designated Survivor. SÃ, la realidad rebasa a la ficción.
El resto es marketing. La campaña de lanzamiento en Brasil incluyó hasta una cadena de Lojas da Corrupção (tiendas de la corrupción) en varios aeropuertos, con accesorios muy novedosos y útiles para que, si piensas entrarle al mundo del dinero sucio, lo hagas con estilo.
(Video: Netflix Brasil vÃa YouTube)
En periodismo decimos que si lo que escribes no indigna a nadie, para qué lo escribes. Este principio aplicarÃa también en la producción de series tomadas de la realidad. Los expresidentes Luiz Inácio Lula da Silva, Dilma Rousseff y sus simpatizantes ya reaccionaron airadamente contra El Mecanismo, al punto de las demandas judiciales. Ya es un capÃtulo más del escándalo.
Samuel Prieto R.
Periodista y productor audiovisual