CIUDAD DE MÉXICO.- El presidente Andrés Manuel López Obrador, negó este jueves, en su conferencia mañanera, que sus hijos sean corruptos tras reportajes publicados esta semana que evidencian presuntos conflictos de interés de dos de ellos en contratos públicos. AMLO tachó de “calumnia” un artículo del portal LatinUs, del periodista Carlos Loret de Mola, que revela que una red de amigos de su hijo Andrés Manuel López Beltrán ha obtenido contratos por 100 millones de pesos de la Administración federal.
- “Sí deben de existir (los contratos), pero mis hijos no tienen nada que ver. Mis hijos no son corruptos, o sea, nada que ver con Loret de Mola, que se ha dedicado a hacer un periodismo mercenario con fines de lucro”, argumentó durante su rueda de prensa diaria.
El presidente aseveró que “no hay ningún problema, nada”, ni conflicto de interés en los contratos que obtuvieron empresas de allegados a López Beltrán de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu).
- “Loret saca un reportaje de que mis hijos están haciendo negocios, cosa que es rotundamente falso. Es parte del periodismo, si se puede llamar así, que él ejerce, porque en realidad es un mercenario que pertenece al hampa del periodismo, no pasa nada porque no es cierto”, respondió.
Además añadió que si Loret de Mola tiene pruebas de lo dicho en sus reportajes, que vaya a la Fiscalía y levante su denuncia: “Está demostrado que es un especialista en montajes y, si tiene pruebas de corrupción, que vaya a la Fiscalía, pero no, es la consigna de que la calumnia cuando no mancha tizna, pero no hay ningún problema”, remarcó.
AMLO acusó a la prensa de acosar a sus hijos
Después de criticar lo dicho en varios reportajes que se han publicado y que acusan a sus hijos de corrupción, también comentó que la prensa está “acosando” a sus hijos: “Ayer fueron a la casa donde vive José Ramón a esperarlo ahí, es un acoso, pero yo le digo a mis hijos: ‘aguanten, no caigan en ninguna provocación’”, indicó.
Esta no es la primera vez que los hijos de López Obrador afrontan acusaciones de corrupción y tráfico de influencias. Mexicanos Unidos Contra la Corrupción y la Impunidad, reveló en enero de 2022 que López Beltrán y su pareja, Carolyn Adams, ocuparon en 2019 y 2020 una residencia en Houston, Texas, que pertenecía a Keith L. Schilling, ejecutivo de Baker Hughes, que ese año obtuvo un contrato de Petróleos Mexicanos (Pemex), un escándalo llamado “la casa gris”.
Mientras que en noviembre de 2021, la revista Proceso y la periodista Carmen Aristegui exhibieron que el programa de reforestación insignia del presidente, Sembrando Vida, se usaba para beneficiar la fábrica de chocolates “Rocío” de los hijos del mandatario en Tabasco, en el sureste del país. Aunque de todas las investigaciones que algunos medios se han dedicado a hacer para evidenciar la supuesta corrupción de los hijos de López Obrador, hasta el momento, no se sabe de alguna denuncia formal, como lo indicó el mismo presidente, que si se tienen pruebas, se presenten ante las autoridades.

Con información de EFE, Infobae, El Universal / Foto de portada: Cuartoscuro