Durante muchos siglos, la vida de Jesús ha sido uno de los grandes misterios para los expertos, los fieles y hasta los no creyentes. A pesar de la existencia de los cuatro Evangelios reconocidos por la Iglesia (Mateo, Marcos, Lucas y Juan), la realidad es que muchas otras personas también convivieron o escucharon sobre Jesucristo. Lo que vieron, y también lo que les contaron, quedó plasmado en una serie de libros que podrían sacudir la visión tradicional sobre Jesús de Nazaret.
¿Qué son los evangelios apócrifos?
Los evangelios apócrifos son una serie de escritos sobre la vida de Jesús que fueron realizados después de su muerte en Jerusalén, pero que nunca fueron aprobados por la Iglesia. ¿Qué significa esto? En términos prácticos, estos textos simplemente no son “oficiales” para religiones como la católica e incluso la ortodoxa.
En el año 325 después de Cristo, a partir del Concilio de Nicea, la Iglesia perfiló los cuatro Evangelios reconocidos oficialmente por la institución: el Evangelio de Mateo, el Evangelio de Marcos, el Evangelio de Lucas y el Evangelio de San Juan. Algunas décadas después, durante Concilios como los de Hipona, Trento y Laodicea, estos fueron ratificados. A partir de ese momento, y con el paso de los siglos, cualquier otro escrito relacionado con la vida de Jesús se consideró fuera del canon, es decir, algo “no oficial” o “no reconocido”.
¿Cuándo se escribieron los evangelios apócrifos?
Al igual que los pasajes bíblicos tradicionales, los evangelios apócrifos fueron escritos en los primeros siglos tras la muerte de Jesucristo. Las historias vistas por testigos o recabadas de voz en voz (como ocurría en aquella época) fueron plasmados en distintos textos para conocer más detalles sobre la vida de Jesús de Nazaret. No obstante, de acuerdo a la Iglesia, la mayoría de ellos eran falsos o simplemente exageraban detalles sobre lo ocurrido. En pocas palabras, casi los etiquetaron como fantasiosos.
¿Quiénes escribieron los evangelios apócrifos?
Dentro de los evangelios apócrifos más conocidos se encuentran el de Pedro, Santiago, María Magdalena, Felipe o Tomás. Pese a ello, de acuerdo a los expertos, el que se llamen así no significa que esos personajes tan importantes hayan escrito sus vivencias. En realidad, muchos de estos textos fueron escritos por desconocidos, pero, utilizaron esos reconocidos nombres para ganar notoriedad.
¿De qué hablan los evangelios apócrifos?
En esencia, los evangelios apócrifos hablan sobre la vida de Jesús, aunque, a diferencia de la Biblia, en muchas ocasiones dan más detalles sobre lo ocurrido. Por ejemplo, el nacimiento de Jesús en Belén, cómo fue elegido José como esposo de María, lo volátil que supuestamente fue Jesús durante su infancia, los impresionantes milagros que realizó de niño (así como su mal comportamiento) o la resurrección tras morir en la cruz.
En otro punto muy importante, varios evangelios apócrifos también revelan más detalles sobre la Pasión y Muerte de Jesús. Un pasaje en particular es muy famoso porque quita gran parte de la responsabilidad del hecho a Poncio Pilatos y prácticamente se la otorga a Herodes. Por ejemplo, en el evangelio de María Magdalena, se le reconoce una importancia mayor a la de cualquiera del resto de los apóstoles de Jesús.
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