Diana Blok, artista uruguayo-holandesa, abre la exposición que este año protagoniza la edición 31 del Festival de la Diversidad Sexual, el FIDS, cuyo arranque, como cada año, anuncia el mes del orgullo en la Ciudad de México.
Su fotografía, en gran formato, vertical, muestra a un chico trans semidesnudo. Un “San Sebastián” con el pecho marcado por dos cicatrices centímetros abajo de los pezones que anuncian la extirpación de unos senos que no correspondían a ese excuerpo de chica.
Este cuerpo de chico se muestra ahora orgulloso. Incluso el pecho se apuntala ligeramente hacia adelante, como preparado para recibir otra tanda de flecha. Apenas si se adivinan los brazos, escondidos a la altura de la espalda baja.
Oda a San Sebastián, Diana Blok. (Foto: Cortesía FIDS)
Se dice que San Sebastián fue muerto en el año 288 por una lluvia de flechas tras comulgar con el cristianismo siendo un soldado romano. El viraje, aunado a su cuerpo torneado y desnudo, con una mirada de éxtasis a pesar de los filos atravesando su carne, lo llevarían a convertirlo a lo largo de la historia en un símbolo del erotismo más que del dolor, y posteriormente en el mártir de la comunidad gay. Una comunidad gay que hoy se cifra en una diversidad sexual cada vez más compleja, pero que puede resumirse en LGBTTIQ+.
El “San Sebastián” de Blok es tan sólo un ejemplo de esa diversidad que asoma en Divina Comedia, la exposición que abre la pieza y que fue inaugurada el pasado 1º de junio bajo la curaduría del también fotógrafo y coleccionista Pedro Slim en el Museo Universitario del Chopo, la casa habitual del FIDS.
Seducción, Nelson Morales. (Foto: Cortesía FIDS)
En la muestra, Nelson Morales, por ejemplo, se adentra en la comunidad muxe del Istmo de Chapultepec, y Graciela Iturbide en una serie de eunucos de la India; Noel Cruz presenta una colección de scorts masculinos al servicio de manes pudientes “con lugar”, y un fotógrafo ciego llamado simplemente Héctor captura escenas eróticas homosexuales entre débiles visuales.
También están presentes los codiciados “chacales” en imágenes, por ejemplo, de Zuriel Bustamante, o el autoerotismo de Shen Wei y las representaciones drags de Annick Donkers, así como el trabajo de Vincent Cianni, quien capturó a exmilitares expulsados de sus filas por su orientación sexual, entre otras propuestas que, en conjunto, conforman la suerte de “divina comedia” que refiere el nombre de la expo.
El lesbianismo, eso sí, es un tema que la muestra queda a deber, pero no el FIDS, cuyas actividades trascienden a la expo y lo incluyen con un programa que va desde las artes escénicas hasta mesas de debate, en un programa que puede consultarse en http://www.fidsmx.com.
El mes del orgullo ya está aquí, y el FIDS, encabezado por Salvador Irys, es la mejor carta de presentación. El clímax sucederá el 23 de junio, cuando la diversidad salga a marchar.
*Las columnas de opinión de CC News reflejan sólo el punto de vista del autor.
Podría interesarte:
OPINIíN: Pesadilla Loo
OPINIíN: Cristo Queer
OPINIíN: “Oasis”, el cortometraje que refleja el lado más vulnerable del SIDA